Una adolescente muere tras inhalar helio en una fiesta
EAGLE POINT, Oregon, EEUU. La semana pasada, una adolescente de 14 años de edad le pidió permiso a sus padres para asistir a una piyamada. Pero en vez de pasar la noche con sus amigas viendo películas y comiendo palomitas de maíz a dos cientos metros de su casa, ella se metió en carro con un montón de amigos y se fue a una fiesta de licor y marihuana.
Después de viajar con un chofer bajo los efectos del alcohol, llegaron a un condominio en donde continuaron tomando licor, y esperando su turno para inhalar helio de un tanque presurizado, cuando una persona inhala helio su voz se vuelve chistosa como la de un personaje de caricaturas, la cual es una “travesura” común de fiestas para reírse un rato.
El helio no es tóxico, se utiliza mezclado con el oxígeno para llenar los tanques de buceo y se puede conseguir fácilmente, los accidentes con este tipo de gas en realidad son raros, sin embargo puede encerrar serios peligros, especialmente cuando se inhala de un tanque presurizado, puede producir el mismo efecto que a un buzo cuando emerge muy rápido de lo profundo a la superficie, se forman burbujas en el torrente sanguíneo y puede provocar una obstrucción en un vaso sanguíneo, impidiendo el flujo de oxígeno al cerebro o al corazón, lo cual puede provocar un infarto agudo al miocardio o un derrame cerebral (accidente cerebro-vascular), este último fue el que lamentablemente le ocurrió a la joven y le causó la muerte.
Esto nos enseña entre otras cosas a no engañar a nuestros padres, a escoger mejor nuestros amigos y diversiones y que las sustancias químicas no se deben tomar a la ligera.
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